Rápidamente se convirtió en el centro de atención de las hermanas y de los niños de casa-hogar, le prodigaron todo su afecto y protección, como dice la hermana Rosalinda él es nuestro Marcelino, él transforma los rostros de todos: de la hermana Bernarda, de Karol, Yackeline sus primeras mamás, porque luego siguieron otras como María Paula, y nosotras que desbordamos de alegría y amor al contemplarlo, moverse, sonreír o simplemente dormir.
Jhon Jairo por su parte con su voz masculina adolescente y arrullo logra dormirlo muy rápido, Juan lo sabe cargar como un papá, Johanna y Valentina, buscan alzarlo cada vez que pueden sin motivo alguno.
La familia de compañeros del Banco de la República, le festeja su cumple mes con algún regalito, son sus buenos benefactores.
El Padre Adolfo de la parroquia San Judas, le ha dado su bendición muchas veces, le sobran brazos para tenerlo y se mantiene en las manos de Dios.
Para la hermana Esperanza es su tema favorito de conversación, de tal forma que lo ha hecho popular entre sus compañeros de trabajo y estudiantes de modo que todos quieren conocerlo, él ha despertado en medio de nosotras, la maternidad espiritual, aquella que sintió nuestra Madre María, por Juan y la llevó a recibirlo en su corazón, como hijo suyo, de la misma forma podemos sentirlo nosotras como sus madres, avivando el espíritu de protección de nuestros fundadores.
Con su sonrisa se nos olvidan nuestros cansancios y fatigas de la jornada, al mirarlo nos preguntamos, ¿quién llegará a ser este niño en el futuro? un doctor, maestro, arquitecto, presidente de Colombia o un Papa colombiano, ¡Quien sabe! sólo Dios sabe, todos los días le pedimos al Señor que llegue a ser un hombre de bien y Santo, lleno de amor para con todos.
Nuestro pequeño José Ángel ahora con casi tres meses de vida pública, sigue creciendo y aprendiendo cada día más, él es un derroche de alegría que nos impulsa a realizar nuestra obra con amor, olvidándonos de nosotras mismas, donando nuestra vida por cada uno de ellos, ya que desde el más grande hasta el más pequeño son el reflejo del amor de Dios.
Que bonito es recordar con cada niño y en estos días con José Ángel; por qué Dios nos ha llamado para la protección del mas débil y desamparado.
Neida y Katherine.
3 comentarios :
Felicidades!!! Ustedes definitivamente hacen de éste un mundo mejor. Su bondad y entrega me impresionan. Un abrazo a ti y a tus hermanas.
Mamma mia, che maternità. Belle foto. bell apostolato. Complimenti
Siempre oro por ti mi angelito del alma, Que Dios te guarde, estás en sus manos y sé fuerte y valiente mi bebé hermoso!
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